Es una acción necesaria para equilibrar la energía interior. Y para equilibrar las relaciones con los demás.
Es muy difícil pedirlo, y no digo nada nuevo, pues para pedir perdón, primero hay que dejar de lado nuestro orgullo, y admitir que hemos errado. Se suele tardar mucho en pedir perdón, y a veces llega demasiado tarde…Pero es necesario, pues alcanzamos la armonía cuando no tenemos nada pendiente.
En tus meditaciones diarias, dedica un poco de tiempo a mirar en tu interior, a repasar tus acciones, y a encontrar esos bloqueos que te impiden seguir adelante. Si encuentras que estas haciendo algo mal o que ya lo has hecho, y que debido a eso debes de pedir perdón por que todavía no lo has pedido, céntrate en descubrir el sentimiento que te lo impide. Descubrirás que la mayoría de las veces es tu orgullo, un exceso de este sentimiento que te está provocando un bloqueo. Otras vergüenza, si eres muy exigente contigo mismo. Revisa las causas e imagina las consecuencias de pedir perdón. Te darás cuenta de que por mucho que te duela dar el paso, obtendrás una gran felicidad y creerás quitarte de encima un gran peso…y eso es lo que habrás hecho exactamente, quitarte un gran peso, ganar paz y aumentar tu armonía.
Después de meditar y de decidir dar el gran paso, si practicas Reiki, puedes mandar un poco de energía a esa situación para que te ayude a reconciliarte con la persona o personas a las que debas pedir perdón.
¿Hay personas a las que no se debería pedir perdón?, yo creo que no. Podemos haber hecho mucho daño, e incluso es posible que la otra persona no nos quiera ni ver, pero es necesario pedir perdón aunque sepamos de antemano que no nos van a perdonar. Esto último no está en nuestra mano ya.
Por el contrario, si es difícil pedir perdón, también lo es saber aceptarlo. Aquí entra en juego otra emoción, como es el resentimiento por sentirse engañado, dolido etc. Es un rencor que anida en nuestro ser que también provoca bloqueos.
Medita sobre ese rencor, de las sensaciones que te provocan. Te darás cuenta de que es un sentimiento negativo que perturba tu ser, y que deseas quitarte de en medio, para alcanzar la armonía. Una vez que seas capaz de controlar esa emoción y desecharla serás capaz de perdonar, aunque tu decisión sea no continuar con la relación que tenías con esa persona, o la continúes con reservas.
Es necesario perdonar y ser perdonados, es un anhelo que todos tenemos.
Ambas cosas hay que hacerlas a tiempo, y con corazón.
Juan Diego
