Todos buscamos la felicidad. Algunos con mas ahínco que otros. E incluso hay personas que al observarlas percibimos que son felices, y si las preguntamos nos dan explicaciones tan simples como "disfruto lo que tengo", "soy así", etc.
La respuesta es precisamente fácil. Hay que ver el mundo a través de los ojos de un niño. Un niño siempre trata de jugar y exprimir al máximo cada experiencia que se le presenta. Aunque siempre se le muestre la misma rutina, puede en principio sentirse aburrido o triste, pero enseguida comprende que es lo que tiene, y pone a volar su imaginación, creando para sí una realidad llena de diversión y felicidad.
Eso es lo que tenemos que hacer...comprender que la realidad que tenemos ante nosotros depende de cómo la miramos, para hacerla mas dura o por el contrario sacar lo positivo que hay en ella y disfrutar la vida.
Un niño siempre quiere jugar y lo consigue; Nosotros los adultos generalmente queremos disfrutar y no lo conseguimos, por que nos empeñamos en ver lo malo de cada situación, y creemos que no se puede dar la vuelta a la tortilla... pero se puede.
